¡Regalad buenos juegos!
La copia de juegos es un mal endémico en el desarrollo de la industria de los juegos de mesa, siendo una característica de los países en desarrollo en lo que respecta a los juegos de mesa modernos. En España la época de los flagios ya pasó, aunque todavía hay quien intente aprovecharse de las creaciones ajenas (con el HQ25 de Gamezone como máximo exponente del despropósito). De China por ejemplo surgen copias de todo tipo de productos, incluyendo juegos de mesa fácilmente accesibles desde páginas de venta on-line - Nada recomendable.
Que en establecimientos comerciales españoles de todo tipo aparezcan copias de juegos de mesa famosos puede ser señal de que la afición a los juegos de es creciente, pero es sin duda algo a erradicar.
En las tiendas Tiger se puede encontrar estos días el juego Fang mig!
El juego vendido bajo la marca "Designed with love in Denmark" no está acreditado, lo cual no es de extrañar pues es un plagio evidente del conocido juego Jungle Speed de Thomas Vuarchex & Pierrick Yakovenko (Asmodée, 1997).
Jungle Speed es un juego de ventas más que millonarias en el mundo desde hace dos décadas. Sus autores y editores ya han solventado en los tribunales algún litigio cuando otras marcas han intentado aprovecharse - Es remarcable la importante sentencia a nivel europeo contra la copia Jungle Jam.
En el catálogo de las tiendas Tiger hay más ejemplos de copias (que encima son de mala calidad), como este plagio del juego Jenga de Leslie Scott (1983): Torre apilable (por 3 €).
Regalemos y compremos juegos, pero juegos de verdad, bien editados con todo el respeto que se merecen sus autores y creadores verdaderos. Porque queremos más y mejores juegos.
¡Nos jugamos!