Un proyecto visto y no visto en Verkami ha sido el del juego de rol Sol Oscuro: El Juego de Rol bajo La Estrella Oscura llamada Ara. El proyecto, cancelado por Verkami al poco de ser lanzado, estaba creado por Jorge Vineyard. Se trataba de hacer un juego de rol basándose en la obra literaria de Troy Denning, que trabajando como diseñador de juegos en la mítica compañía TSR (creada por Gary Gygax para publicar su Dungeons & Dragons en 1973), creó una ambientación de un desértico mundo apocalíptico para una campaña de D&D, de la que después además escribió varios libros y relatos: Dark Sun (Sol Oscuro).

    

De hecho la ambientación de Sol Oscuro se ha mantenido en sucesivas ediciones del juego de rol D&D, con sus últimas encarnaciones publicadas por Devir en España.

El proyecto de financiación colectiva en Verkami hablaba de un nuevo juego de rol (sin referencia a D&D) y usaba un logotipo clásico.

Logotipo usado en la campaña de Verkami.

Se presentaba con variados textos de ambientación:

Sobre el producto en sí sólo se ofrecía un futuro reglamento (todavía por escribir) en formato pdf:

Tras esta primera campaña de 1.300 €, se anunciaba otra posterior para imprimir el juego de rol en un futuro indeterminado:

No es la primera vez que a Verkami le sucede algo así - recordemos por ejemplo las horas de vida de madrugada del falso Heroquest (HQ25 de Gamezone) en Verkami hace ahora un año, por motivos muy similares. Claro que es mejor rectificar que lanzarse al vacío por el negocio con pocos escrúpulos como hizo la plataforma Lánzanos en ese tristemente conocido culebrón.

En el campo de los juegos es imprescindible un cuidado de los derechos de los autores y creadores, que en otros ámbitos (como el literario) están más establecidos y reconocidos socialmente.

Al respecto de esta historia, Omar El Kashef escribe en su blog El Opinómetro 3.1 (dedicado al rol principalmente) un artículo con el título de: Dark Sun: Ver(kami) para creer.

(...) Siempre he dicho que no tengo nada en contra de las fórmulas de financiación colectiva per se, sino más bien contra el uso que se les da en muchos casos, incuido el hecho de que viabilizan productos que personalmente no creo que reúnan un mínimo estándar de calidad para ser susceptibles de cobro.(...) Cosas como el fallido intento de Dark Sun dan que pensar. Por lo pronto uno se pregunta en qué demonios piensan los responsables de las plataformas de financiación (aparte de llevarse su porcentaje crudo de cojones) para permitir que se cuelen proyectos de los que podríamos decir en el mejor de los casos que son algo turbios (ya no digamos abiertamente fraudulentos o directamente agresivos contra la inteligencia media). ¿Dónde están los controles de calidad, las salvaguardas y las alarmas anti-marrón, que es en lo que podría haberse convertido todo esto? Y conste que no es la primera vez que esto ocurre (no llevo la cuenta porque francamente paso de estos temas, pero no puedo dejar de mencionar el célebre Hero Quest Gate).

 

Es inevitable que las ventajas que las plataformas de finanaciación colectiva suponen para la autoedición, lleven aparejadas inconvenientes al no poder controlarse eficazmente un umbral de calidad tras las apariencias, entre otros puntos. El necesario trabajo de editor, en el sentido que tiene en el mercado alemán de juegos de mesa (recordemos la figura de Erwin Glonneger como ejemplo) brilla por lo general por su ausencia y corremos el riesgo de no desarrollar esa necesaria figura, o su tarea, en nuestro mercado español de juegos aparentemente con buena salud y potencial de crecimiento.

Una reflexión en esa línea hace Rhiannon Ochs en el blog whoseturnisitanyway, centrándose en la principal plataforma de juegos en los USA: Kickstarter Killed the Board Game Star.

(...) Kickstarter se lanzó en 2009. En un mes cualquiera de este año ha habido tantos proyectos financiados como algunas editoras establecidas pueden publicar en dos décadas. Ha habido 5.428 proyectos de juegos de mesa en total en Kickstarter [a fecha de diciembre de 2014], de los cuales 2.677 han tenido éxito. (...)  Kickstarter ha financiado más juegos de mesa en cuatro años que los que produce toda la industria de juegos en 2013. Ha habido más intentos de juegos de mesa en Kickstarter en cuatro años que todos los juegos publicados en 2012 y 2013.

(...)

Ha habido juegos espectaculares surgidos de Kickstarter. (...) Algunos grandes juegos han fracasado en sus intentos de financiación y/o han sido cancelados por falta de interés. Algunos grandes juegos han alcanzado sus objetivos de financiación por los pelos. O peor, algunos juegos claramente horribles han sobrepasado sus objetivos de financiación por motivos que no puedo ni empezar a adivinar. (...)

Ánimo a todas las personas autoras de juegos y a quienes los hacen una realidad que podamos jugar. Que tengamos los mejores juegos posibles.

¡Nos jugamos!

 P.D.: El asunto del Sol Oscuro nos ha recordado, únicamente por su nombre, a otro proyecto de financiación en Kickstarter con una historia solar mucho más triste y que todavía no ha acabado aunque se inició hace más de tres años: Katalyka, un juego de mesa sobre expandir civilizaciones por la galaxia. Tras financiarse con éxito, meses más tarde del fin de la campaña su autora Molly Friedrich justificó los retrasos diciendo que el Sol le hablaba para decirle que no publicase el juego, por ser demasiado cercano a la verdad (¡!). Y dio más señales de desequilibrio cuando después dijo que sufría ataques de plasma espritual, o que eran causados por un entramado tecnológico de la Marina de los USA y servicios secretos. Aparentemente ella no bromeaba. Las últimas noticias (del pasado verano) señalaban que la autora estaba proudciendo el juego de foram artesanal, que estaba recabando las direcciones de los mecenas y tal vez en algún momento pueda comenzar los envíos. Ojalá esto tenga un buen final, para los mecenas y para la propia autora.

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