Festival International des Jeux Cannes 2008, por Josep M. Allué.

Del 13 al 17 de febrero de 2008 se celebró en Cannes la 22ª edición del Festival de Juegos de Cannes. Con una asistencia de 130.000 visitantes y 15.000 participantes en alguno de los 21 torneos que se celebraron (desde Scrabble hasta Mah-Jong).  

Y como cada año la expedición catalana se fue para allá dispuestos a ver, jugar, comprar y presentar juegos en nuestro país vecino. Así fue y así os lo contamos. 

El Festival de Juegos de Cannes es el festival más querido de la ciudad pues, además de centrarse en juegos de todo tipo, es el único abierto de forma gratuita a toda la población.

La ciudad se vuelva en el Festival de Juegos. Está presente en toda la ciudad y los cargos públicos participan en la ceremonia de entrega del As d’Or.

Poco a poco, el festival se está convirtiendo en el punto de referencia del juego “latino” - en opinión del autor de juegos Phillippe des Pallieres - en contraposición con Essen o Nüremberg, donde prima un ambiente mucho más “serio”.

 
Phillippe des Pallières y Dominique Ehrhard…probando El Tesoro del Capitán Flint! (un prototipo de Josep M. Allué).

Uno de los atractivos del Festival es la entrega, el viernes por la noche, del As d’Or al juego del año en Francia que se otorga en dos categorías, infantil y adultos.

Matthieu d’Epenoux (editor de Cocktail Games) con el nominado Kiproko de Virginia Charves & Claude Weber.

Como ya sabéis, el infantil lo ganó Les Chevaliers de la Tour, de Christian Tiggemann y editado por Habba y el de adultos fue para Marrakech, de Dominique Ehrhard editado por Gigamic.

Los Caballeros del Castillo, de Christian Tiggemann.

Jugando al Marrakech con Víktor Bautista.
 

Actualmente el Festival se compone de diversos espacios. El mayor es el Salón de Juegos de Sociedad. En él las principales editoras de juegos como Asmodee, Cocktail, Tilsit, Goliath, Playmobil, Ystary… montan sus stands orientados a que la gente de todas las edades pasen a jugar y a divertirse un buen rato. Además, los visitantes pueden jugar a todos los juegos nominados al As d’Or en una zona especial y también se encuentran diferentes tiendas donde poder comprar un montonazo de juegos.

El stand de Repos Production bien lleno de sombreros mejicanos, como debe ser. 

Diversos stands.

Otra zona importante es el Fan Festival, centrado en juegos de video y manga. Aquí sí que se paga, 6 euretes, pero está a reventar de gente joven, muchos de ellos disfrazados como mandan los canones, que vienen a pasar un buen rato con las alfombras de baile o buscando material exclusivo recien importado.

La zona de torneos es inmensa, y se encuentra distribuida por todo el palacio. La verdad es que la primera vez que vas a Cannes te sorprende mucho ver a 500 personas de todas las edades y aspectos – desde yayas venerables a jóvenes con botas camperas y chupas de cuero - jugando juntos al scrabble. Este año, además, se celebraba el Campeonato del Mundo de Carrom, lo que reunió a un gran número de jugadores de todo el mundo.

Y finalmente está el Off, quizá el espacio más interesante para los autores y los jugones. Se trata de una gran sala donde cada noche puedes jugar hasta la hora que quieras, ver a algunos de tus autores favoritos y charlar con editores.

Gonzalo, responsable de Oya y de la dinamización del Off.

Juegos antiguos en exposición.

Algunos juegos que nos gustaron este año fueron el Chabyrinthe de Antoine Bauza editado por Cocktail Games, el galardonado Marraskech de Dominique Ehrhard editado por Gigamic, Les Chevaliers de la Tour de Christian Tiggemann editado por Habba, los curiosísimos Funkeys (unos juegos de ordenador coleccionables), o el divertidísimo Kakerlakensalat, de Jacques Zeimet.

Versión demostración (a mayor escala) de Chabyrinthe de Antoine Bauza en el stand de Cocktail Games.

El espacio de los Funkeys , de los cuáles compramos unos cuantos para probarlos.

Una agradable sorpresa: el logo del JdA 2005 en la caja francesa de ¡Aventureros al tren! de Alan R. Moon.

Josep M. Allué - al lado de un Funkey esquelético un tanto deprimido.

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